Los trastornos mentales son una de las principales causas de carga de enfermedad en todo el mundo. Las modalidades actuales de tratamiento basados ??en la intervención terciaria han demostrado un efecto limitado en la disminución de esta carga. La creciente evidencia científica indica que nuestro campo debería moverse hacía la prevención primaria y secundaria más ambiciosa y la promoción de la salud mental. Particularmente alentadores son los resultados de las intervenciones tempranas en el autismo y los sujetos con alto riesgo de psicosis que pueden cambiar la trayectoria esperada para un resultado menos incapacitante. A pesar de la evidencia acumulada respecto a los beneficios potenciales de la detección e intervención temprana de los trastornos mentales, todavía hay pocas iniciativas de salud pública y clínicas que los persegan, en comparación con otras áreas de la medicina. Se examinarán los datos científicos disponibles sobre los factores de riesgo, la detección temprana y la relación coste-eficacia de las intervenciones tempranas a fin de encontrar posibles explicaciones de la brecha entre el conocimiento y las políticas existentes y las prácticas clínicas. Además, se propondrán los futuros pasos con el fin de avanzar en la prevención de la salud mental y la promoción.

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