Mediante una técnica especial de captación de imágenes por resonancia magnética, unos científicos han descubierto que los cerebros de personas con trastorno bipolar tienen una serie de diferencias con respecto a los cerebros de gente normal que habían pasado desapercibidas hasta ahora.

En particular, el equipo del Dr. John Wemmie, profesor de psiquiatría en la Universidad de Iowa, Estados Unidos, ha descubierto diferencias significativas en la materia blanca de los cerebros de los pacientes, y en el cerebelo, un área del cerebro no relacionada anteriormente con el trastorno. Curiosamente, las diferencias en el cerebelo no estaban presentes en pacientes que tomaban litio, el tratamiento más habitual para el trastorno bipolar.

El trastorno bipolar afecta a aproximadamente un 1 por ciento de la población. A pesar de ser relativamente común, los científicos no comprenden bien las causas de este problema psiquiátrico, que se caracteriza por cambios de humor súbitos, desde un estado normal a otro de fuerte depresión, o a un estado de euforia exagerado y un tanto desconectado de la realidad, sin causas externas racionales que lo justifiquen.

El estudio examinó a 15 pacientes con trastorno bipolar y a 25 sujetos sin la dolencia pero coincidentes en edad y género. Los pacientes bipolares estaban todos en el estado de ánimo normal (ni deprimido ni eufórico) durante el estudio.

Los investigadores comprobaron que, en comparación con las personas sin trastorno bipolar, la señal medida con esta técnica de resonancia magnética en los pacientes afectados por él se encontraba aumentada en la materia blanca cerebral y en la región del cerebelo. Los motivos de que la señal fuera elevada podrían ser una reducción en el pH o una reducción en la concentración de glucosa, ambos factores influidos por el metabolismo celular.
Investigaciones previas han sugerido que un metabolismo celular anómalo podría ejercer un papel importante en el trastorno bipolar. Sin embargo, la investigación de las anomalías metabólicas en el cerebro se ha visto dificultada por la falta de herramientas adecuadas de toma de imágenes cerebrales. Los métodos disponibles son lentos, de baja resolución, y precisan que los investigadores identifiquen la región de interés al principio del estudio. En cambio, la nueva técnica ahora probada puede obtener rápidamente una imagen en alta resolución de todo el cerebro. El reciente estudio a cargo del equipo del Dr. Wemmie constituye la primera vez que esta nueva técnica de observación por resonancia magnética se ha utilizado para investigar una enfermedad psiquiátrica.

Wemmie espera que los últimos resultados proporcionados por la nueva técnica ayuden a identificar con más detalle las anomalías que subyacen en el trastorno bipolar y lleven a mejores formas de diagnosticar y tratar este problema. Aunque el litio suele ser un eficaz estabilizador del estado de ánimo para personas con trastorno bipolar, ocasiona numerosos efectos secundarios desagradables para los pacientes. Si el efecto del litio en el cerebelo es la clave en esta eficacia como estabilizador del estado de ánimo, entonces un tratamiento más enfocado que cause el mismo cambio en el cerebro sin afectar a otros sistemas podría ser mejor para los pacientes con trastorno bipolar, tal como reflexiona el Dr. Wemmie.